The little school in the green
Lo que pudiera parecer el título de un cuento, hace referencia al centro escolar en el que, desde el 16 al 27 de abril de 2018, he realizado una estancia profesional del MECD.
Profondsart es una escuela rural
de enseñanza libre y católica situada en
Limal, en la Región del Brabante Valón
(Bélgica).Este centro de Infantil y Primaria acoge 326 alumnos de edades comprendidas
entre los 2,5 años y los 12 años.
Si bien hay diferencias organizativas,
curriculares y espaciales significativas, han sido las metodológicas y la
autonomía de los niños lo que más me ha llamado la atención.
Las clases tienen una duración
de 50 minutos y en ellas predomina más lo práctico que lo académico, el trabajo
en equipo y por parejas que el
individual y los proyectos frente los libros de texto. La presencia de
lenguas extranjeras está limitada al Neerlandés en 5º y 6º de Primaria.
El ambiente, en general, es
relajado, silencioso, muy respetuoso y como observadora diría que los niños
están felices y se sienten motivados. En ningún momento he visto frustración
por notas, desaliento por deberes interminables, competitividad, prisas y papeles para todo y para todos. Los
miércoles, los alumnos tienen únicamente
media jornada escolar y los profesores programan las reuniones y actividades.
La observación de clases diarias
de diferentes materias, cursos y profesores ha sido muy estimulante y motivador
permitiéndome compartir experiencias e intercambiar impresiones y metodología.
He tenido un papel activo en la biblioteca escolar mediante animaciones a la lectura en lengua francesa para distintos grupos y niveles y en
la realización de un libro digital con los alumnos de cuarto.
A modo de síntesis, esta
experiencia me ha aportado un enriquecimiento personal, profesional y
lingüístico, permitiéndome ver mi centro con una mirada e ilusión renovada.